Nuevo proceso para reutilizar el glicerol procedente del biodiesel
El proceso se basa en la digestión del glicerol por parte de bacterias en ausencia de oxígeno. Gracias a ello se podría hacer más rentable el uso del biodiésel.
En la búsqueda de nuevas fuentes de energía poco contaminantes, el uso de combustibles no fósiles como el hidrógeno y el biodiésel son las alternativas más valoradas. El inconveniente que presenta el biodiesel es que en su síntesis se genera un residuo llamado glicerol, el cual es difícil de reutilizar y contiene gran cantidad de impurezas. Se estima que solo en Europa se produce más de un millón de toneladas de glicerol que no puede reutilizarse en ningún otro sector industrial. La posibilidad de reutilizar el glicerol como materia prima para obtener otros productos conduciría a que el uso del biodiesel fuese más rentable.
Un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han diseñado un método para convertir el glicerol en 1,3-propanodiol, un compuesto de interés para la producción en el mercado industrial general. Aplicable la producción de fibras sintéticas, pinturas, lubricantes o anticongelantes, entre otros.
El método desarrollado por los investigadores ha sido utilizar microorganismos en ambientes anaerobios, es decir sin oxígeno, en los que éstos digieren el glicerol generando como productos etanol, hidrógeno y 1,3-propanodiol. Los tipos de bacterias utilizadas sobre todo han sido las bacterias del género Clostridium, propias de ambientes sin oxígeno. Aunque también se han usado las del ácido láctico, Lactobacillus y enterobacterias, que suelen estar presentes en diferentes órganos del ser humano.
Proceso de obtención de biopelículas de 1,3-propanodiol usando como soporte espumas de poliuretano. Créditos: UAM
A partir de los compuestos generados se han construido biopelículas en distintos soportes para su posterior uso. Según los resultados, las espumas de poliuretano usadas como soporte no sólo favorecieron el crecimiento de las bacterias sino también la retención de biomasa. Durante los cien días de observación del cultivo se consumió entre el 91 y 100% del glicerol, con un rendimiento de entre el 44 y 52 % en la formación de 1,3-propanodiol.
La investigación se ha publicado en la revista Environmental Science and Pollution Research. Según las conclusiones obtenidas es posible transformar de forma eficiente el glicerol en un compuesto con valor industrial. El procedimiento sería competitivo por su bajo coste de implantación y operación en relación a los procedimientos químicos, y además resolvería el problema del impacto medioambiental que causa como subproducto residual.
Según las conclusiones de un grupo de científicos de la Universidad de Poitiers se debe a la combinación de dos fenómenos combinados: el arrastre de Nansen y el arrastre de Ekman.
Por su resistencia a los ataques de los depredadores y su robustez, las características de su exoesqueleto pueden ser útiles en aplicaciones de ciencia de los materiales y mecánica.
El proceso se basa en la digestión del glicerol por parte de bacterias en ausencia de oxígeno. Gracias a ello se podría hacer más rentable el uso del biodiésel.
La existencia de la proteína previene una reacción inmune exagerada, el cual es un mecanismo crítico en la supervivencia en enfermedades autoinmunes como sepsis y colitis en ratones.