El «cometa del siglo»: una maravilla cósmica en nuestro cielo
Los cometas son fascinantes. Estos cuerpos celestes, compuestos de hielo, polvo y rocas, aparecen de repente en el firmamento, despertando admiración y curiosidad. Algunos cometas se vuelven tan espectaculares que capturan la atención del mundo entero, ganándose títulos como el «cometa del siglo». Aunque esta etiqueta ha sido utilizada varias veces, uno de los más destacados en las últimas décadas fue el cometa Hale-Bopp en 1997, pero ahora, al cometa que nos referimos es el C/2023 A3 (Tsuchinshan-ATLAS).
30 de Septiembre de 2024
Los cometas son cuerpos que orbitan el Sol, originándose en las regiones más remotas de nuestro sistema solar, principalmente en el Cinturón de Kuiper y la Nube de Oort. Están formados por una mezcla de hielo, polvo y roca. A medida que se acercan al Sol, el calor provoca que el hielo se sublime, generando una atmósfera brillante llamada coma, y una o más colas que siempre apuntan en dirección contraria al Sol, debido a la presión del viento solar.
El término «cometa del siglo» se reserva para aquellos cometas que tienen un brillo excepcional y pueden ser vistos a simple vista desde la Tierra durante semanas o meses. Estos fenómenos suelen pasar una vez en la vida, y son esperados con gran expectación. No todos los cometas cumplen con estas características, pero cuando lo hacen, su visibilidad es asombrosa y puede ser observada incluso en cielos urbanos.
El cometa Hale-Bopp es uno de los mejores ejemplos. Su acercamiento a la Tierra en 1997 lo convirtió en un espectáculo visible durante dieciocho meses. Su tamaño excepcionalmente grande (aproximadamente sesenta kilómetros de diámetro) y su órbita larga lo hicieron visible incluso a plena luz del día. Fue uno de los cometas más observados y fotografiados de la historia.
Cuando un cometa de estas características se hace visible, no solo atrae la atención de los astrónomos y científicos, sino también del público en general. Estos cometas inspiran no solo asombro, sino también mitos y leyendas. En la antigüedad, los cometas eran a menudo considerados presagios de grandes eventos, buenos o malos.
Hoy, la tecnología ha avanzado lo suficiente como para que las misiones espaciales puedan acercarse a los cometas, como lo hizo la misión Rosetta de la Agencia Espacial Europea, que en 2014 logró enviar un módulo de aterrizaje a la superficie del cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko. El estudio de los cometas nos proporciona información valiosa sobre los orígenes de nuestro sistema solar, ya que estos cuerpos son residuos primigenios de su formación hace 4600 millones de años.
El cometa C/2023 A3 (Tsuchinshan-ATLAS), conocido actualmente como «el cometa del siglo» por algunos, ha comenzado a hacer su aparición en el cielo durante las madrugadas de finales de septiembre de 2024. Descubierto en enero de 2023, este cometa ha generado grandes expectativas, ya que podría llegar a ser visible a simple vista y se espera que ofrezca un espectáculo notable.
Actualmente, el cometa es visible en el cielo justo antes del amanecer, en el horizonte este-sureste, y se espera que su brillo alcance su punto máximo estos últimos días de septiembre, cuando estará en su perihelio, el punto más cercano al Sol. En los días siguientes, especialmente hacia finales de septiembre y principios de octubre, los observadores en el hemisferio norte podrían observar el cometa junto con una delicada luna menguante.
El evento más destacado podría ocurrir entre el 9 y el 10 de octubre, cuando el cometa pase casi directamente entre la Tierra y el Sol. En este momento, un fenómeno de dispersión de luz llamado forward scattering podría hacer que el cometa se vuelva hasta 100 veces más brillante, ofreciendo la posibilidad de ser visible durante el día, aunque sería difícil de observar sin el equipo adecuado.
Después de ese paso cercano al Sol, el cometa reaparecerá en el cielo nocturno y seguirá siendo visible por algunos días más en octubre, aunque se desvanecerá rápidamente a medida que se aleje de la Tierra y regrese a las profundidades del espacio.
Aunque algunos lo han catalogado como «el cometa del siglo», los astrónomos son cautos, ya que los cometas son notoriamente impredecibles en cuanto a su brillo y comportamiento. Sin embargo, es probable que C/2023 A3 sea uno de los eventos astronómicos más destacados del año.
30—6. OCTUBRE