Eva Rohlfs nació en Coburgo el 11 de agosto de 1912 y estudió en Würzburg, Múnich y Kiel entre 1931 y 1933.

Abandonó sus estudios durante un tiempo para dedicarse a las tareas del hogar, algo habitual en la época. Sin embargo, jamás dejó de sentir pasión por la observación del cielo e ingresó en la Universidad de Göttingen en plena Segunda Guerra Mundial.

Una vez finalizada la guerra entró a trabajar como asistente de astronomía en el Observatorio Sonneberg junto al profesor Cuno Hoffmeister, astrónomo especializado en el estudio de estrellas variables (aquellas que vistas desde la Tierra se aprecia una variación en su luminosidad) y asteroides. Hoffmeister también fue el fundador y director del Observatorio Sonneberg hasta su muerte. 

Con los datos obtenidos durante seis años de observaciones, Eva obtuvo su doctorado en astrofísica en 1951 por la Universidad de Jena, institución a la que pertenecía el observatorio. 

Desde Sonneberg realizó importantes observaciones de las estrellas variables que detalló en el artículo Zur Struktur und Entstehung des Perseidenstroms (Sobre la estructura y el origen de la corriente de las Perseidas) incluido en las Publicaciones del Observatorio Astronómico de Sonneberg.

También dedicó parte de su estudio al cálculo de las perturbaciones seculares (perturbaciones de ciclos muy lentos; hasta millones de años) de planetas principales y menores que detalló en el artículo Die Säkularstörungen des Scorpius-Sagittarius-Stroms (Perturbaciones seculares de la corriente de Escorpio-Sagitario), solo que este texto fue publicado en 1957 en la revista Astronomische Nachrichten tras su muerte.

En el observatorio Sonneberg conoció al también astrónomo y conocido detractor del régimen nazi Paul Oswald Ahnert (famoso por ser un pionero en la creación de un calendario de eventos astronómicos) con el que se casó.

Eva Ahnert-Rohlfs murió de forma inesperada el 9 de marzo de 1954 con tan solo 41 años.

Créditos de imagen de portada: NASA

Nota del autor: quiero agradecer personalmente a Thomas Müller, Director del Astronomiemuseum der Sternwarte Sonneberg, su amanble atención y habernos facilitado la única imagen que existe de Eva Ahnert-Rohlfs para que todo el mundo pueda poner rostro a esta pionera de la astronomía.